Bienvenida impecable y profesionalidad incomparable en la clínica dental en Moldavia

Regresé de Moldavia de emergencia debido al coronavirus. Tuve que acortar mi estadía en 6 días, pero gracias a la capacidad del equipo de la clínica pude regresar a Bélgica. Si tuviera que permanecer bloqueado, el director de la clínica me hizo una propuesta súper agradable incluso antes de que tuviera que hablar, si no estuviera bloqueado 1 mes, entonces el precio de mi estadía habría explotado, ya por todo eso, un GRAN agradecimiento. Ahora hablemos del tratamiento y hospitalidad, coordinación y recepción. Nada que decir, aquí los problemas muy pequeños que encontré se deben al hecho de que mi estado general de salud es complicado debido a las intervenciones médicas y de otro tipo que me sometieron. Llegué a la clínica, me pusieron en manos súper amables y profesionales, después de que me hubiera gustado recibir una anestesia general debido al hecho de que tengo la fobia de los dentistas. Después de varios exámenes en varios hospitales, me rechazaron la anestesia general, no querían correr el riesgo. A pesar de un certificado firmado que decía que podía hacerlo. Conclusión, todo a su favor por no tomar a la ligera los casos de los pacientes. Con respecto al equipo médico, son personas realmente excelentes tanto en términos de hospitalidad como de tratamiento. En resumen, volveré para darle noticias en breve, pero ya de antemano si necesita realizar el tratamiento, sinceramente, no tenga miedo ni desconfianza, nunca he visto tanta profesionalidad en Bélgica como en la clínica Punto Bianco. Bien hecho, señor MIHAIL por poder rodearse de un gran equipo, y le aseguro que no soy un cliente fácil. Y finalmente, una palabra para el Sr. Nicolás, que es igual de bueno, que está atento y lo asesora de manera profesional sin tratar de facturar lo más posible, por el contrario, Gracias, Sr. Nicolás, especialmente por no haber cambiado nada!